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Hay tres aspectos que determinan la efectividad de un inoculante para aumentar el rendimiento de la soya (soja) y la utilidad del agricultor:
- Las cepas de bacterias usadas:
tienen que ser de alta capacidad de fijación de nitrógeno en condiciones de campo. Esto es tan importante que los países avanzados solo permiten la comercialización de inoculantes que tengan las cepas autorizadas y facilita el suministro de estas cepas a los fabricantes de inoculantes a través de organismos especializados. Agroindustrias Lucano ha probado en Santa Cruz las cuatro cepas autorizadas en Brasil y fabrica los inoculantes FERTIMAX con las que han mostrado mejor respuesta en Santa Cruz. Para asegurar su pureza se provee de cepas autenticadas de organismos especializados del Brasil.
- La cantidad de bacterias que llega a la semilla:
Cada fabricante formula su inoculante de acuerdo a consideraciones técnicas y comerciales. Como referencia actualmente Brasil exige que los inoculantes aseguren la llegada de 600.000 bacterias por semilla de soya. El producto de la concentración del inoculante (cantidad de bacterias por gramo o mililitro) y su recomendación de uso (inoculante a usarse en cierto peso de semilla) dividido por el peso de semilla nos indica el numero de bacterias por semilla. Para conocer la cantidad de bacterias por semilla use nuestro calculador. Es común en la comercialización de inoculantes el empleo de más de una referencia de concentración, una mas alta referida generalmente como “a la fabricación” y otra más baja indicada como “concentración mínima, “a la comercialización”, u otros. Recomendamos el uso de las referencias más bajas al tiempo de comparar productos.
- El manejo del inoculante para asegurar un mínimo de bacterias vivas por semilla inoculada:
Los inoculantes en polvo y las nuevas formulaciones en liquido han mostrado que mantienen al menos la cantidad de bacterias vivas que se declara como “mínimo o “a la comercialización” hasta por dos años luego de su fabricación,
siempre que se los mantenga en condiciones adecuadas. La condición mas importante es el mantener el producto debajo de los 25°C, temperatura que viene indicada en cajas, envases,
folletos y hojas de seguridad de casi todas las marcas de inoculantes. Esto implica el organizar lo que se conoce como una cadena de frío
que abarque fábrica, transporte, almacenamiento y de ser posible distribución hasta la entrega del inoculante al agricultor. Esta cadena es difícil de mantener sobre todo durante la importación de inoculantes, aspecto que da una ventaja incontestable a los productos fabricados localmente como son los inoculantes FERTIMAX.
Presentamos gráficas mostrando la cantidad de bacteria viva prometida por el fabricante de diferentes inoculantes disponibles en Bolivia.
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El primer gráfico muestra la concentración de bacteria por semilla grande en el momento de inocular.
Aquí comparamos el inoculante liquido FERTIMAX con cuatro inoculantes líquidos importados de Argentina, usando la información en su literatura.
(clic el gráfico para agrandarlo)
El segundo gráfico muestra la concentración de bacteria por semilla chica en el momento de inocular.
También comparamos el inoculante liquido FERTIMAX con cuatro inoculantes líquidos importados de Argentina, usando la información en su literatura.
(clic el gráfico para agrandarlo)
En el tercer gráfico, comparamos Fertimax Sphagnum en polvo con el inoculante Argentino en polvo y el otro
inoculante Boliviano en polvo, mostrando la cantidad de bacteria viva prometido en cada semilla grande, de acuerdo a la literatura suya.
(clic el gráfico para agrandarlo)
En el cuarto gráfico, también comparamos Fertimax Sphagnum en polvo con el inoculante Argentino en polvo y el otro
inoculante Boliviano en polvo, mostrando la cantidad de bacteria viva prometido en cada semilla chica, de acuerdo a la literatura suya.
(clic el gráfico para agrandarlo)
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